Este paso agrupa una serie de actividades que constituyen, por un lado el verdadero dolor de cabeza y por otro lado, la más increible satisfacción.
Ahora, con la idea más o menos clara o estando en total contacto con mi dibujo o mi angel interno comienzo a jugar con las herramientas, un rato con la segueta, un rato con alicates, un rato con la lija y así con todo lo demás, repitiendo su uso según las necesidades que se presentan ante el reto de obtener una pieza terminada.
Por supuesto, cada cierto tiempo o en determinado punto del proceso, recurro a mi fiel amigo el fuego, mediante su intervención se reubican moléculas y átomos ya sea para "ablandar" o para "unir fuertemente".
De nuevo, cada sub paso en esta etapa tiene sus retos y sus satisfacciones y ambos me acompañarán durante toda mi vida en esta profesión. Cada paso requiere herramientas específicas y cada herramienta requiere conocimientos para su uso, la herramienta equivocada o el uso inadecuado de ella puede acabar por completo con el desarrollo de la obra de arte que tenemos entre las manos, lo que puede significar el regreso al paso 1, el regreso a la fundición o en otro caso, no menos frustrante, nos obligará a modificar el diseño de la pieza original obteniendo un resultado que no se había pensado.
También debo decir que esta etapa es la que más costo tiene para mis manos, ya que invariablemente mis dedos son objeto de limadas, lijadas, quedamas y hasta perforadas, jajajaja...... CREANLO !, una vez me abrí un orifico de 1 mm de diámetro y mucho mucho mucho dolor seguido de lo que parecía un interminable período de picazón. En otra oportunidad estaba tan emocionada limando una pieza diminuta, logrando la forma que yo tenía prevista y al terminar, mi dedo pulgar tenía una larga y profunda línea, un doloroso canal de cuya formación no me había percatado.
Que les puedo decir !, a fuerza de quemaduras es que se aprende a no tocar las piezas recien soldadas o refogadas, jajajajaja!!!!.....
Pero a cambio de este pequeño costo corporal, tenemos la bendición de ver como la pieza va cobrando vida, cómo el metal contínua transformándose, cambiando no solo su forma sino su color, ya que cada proceso cada paso deja su huella sobre él.
Hay casos en que la pieza soñada se compone de diferentes partes, en este paso donde trabajo todas las partes que compondrán la pieza y todas deben ser perfectas y quedar listas para la construcción.
Adelante en esta aventura!!!!
Hg / Junio 14, 2010
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