UNA EMPANADA GALLEGA QUE NI ES GALLEGA NI EMPANÁ

Ya me conocen!!!!, siempre estoy inventando cosas y hoy no fue la excepción !

Después de limpiar la casa y hacer algunas diligencias se me antojó cocinar y pensé que después del linguini con salmón y vodka del medio día, bien podía preparar la segunda empanada gallega de mi vida.


Pues muy animada y dispuesta a todo, comencé a preparar los ingredientes y .... ADIVINEN !.... me di cuenta que no tenía suficiente harina de trigo peeeeeroooooo tenía un montón de harina de arroz, y pensé.. harina es harina !... y convencida de que podría hacerle frente a cualquier imprevisto comencé a preparar mi "empanada gallega a lo Helena".


Tomé la receta publicada en Las Cosas de Xela, un excelente blog, y procedí emocionada a preparar las cebollas, la carne, que dicho sea de paso no era un trozo de medio kilo sino medio kilo en trozos, jajajajaja.... (esto me recuerda aquellos chistes de NO ES LO MISMO::::), y puse las pasas en remojo.


Hasta aquí, todo bien. Los deliciosos olores invadían mi cocina y escapaban para aromatizar toda la casa. Yo feliz escuchando aquellos "mmmmmmm huele rico!".

Llego el momento de la montaña de harina con el hueco en medio, el agua, el aceite y lo demás; claro que después del desastre que armé con la primera montaña al preparar mi primera empanada, amasando por primera vez en mi vida, preferí hacer una montaña pero contenida por las paredes de un envase supuestamente cómodo para amasar......

Bien!, comencé el amasado de las 22 cucharadas de harina que se convirtieron en 38 cucharadas para poder separar aquel pegoste de mis dedos, del recipiente y de todo lo demás.


Hasta aquí yo seguía pensando que harina es harina y yo una valiente e ingeniosa mujer, más que capaz de resolver cualquier inconveniente entre el arroz y el trigo......

Bien!, llegó el momento de ESTIRAR.......

Tomé la mitad de la masa, la coloque en el mesón y dispuesta con el rodillo comencé un trabajo agotador de tratar de estirar aquello que no hubo forma de estirar.....ni de despegarlo del rodillo, por más inventos que inventé, jajajajaja.

Después de embadurnarme de harina de arroz, pasar las más cruentas batallas para separar el pegoste del rodillo, logré aplanar aquella masa lo suficientemente delgada y homogeneamente posible para forrar un molde ya preparado y comenzar el relleno. ADIVINEN !!!!...

Esa cosa que me costo más de media hora y unos cuantos improperios alistar, no se despegaba del mesón......

PROHIBIDO REIRSE !....

Yo ya estaba verde.. más bien pálida, entre la mezcla de apellidos, el hervor de la sangre, el olor delicioso de la carne, la cebolla y los pimientos, y aquella cosa pegada en mi mesón. Por supuesto, mi esposito que estaba descansando en la sala, solo disfrutando de los olores, escuchó mis múltiples "BIIIIIIIIP" y vino a ver qué me sucedía.

Ahora, además de pelearme con la masa de arroz me tocó escuchar toda la explicación de porqué la masa de arroz y la masa de trigo se comportan diferente ... SIN COMENTARIOS!... lo único que me faltaba era escuchar el sermón fisico-químico y tener que reconocer qué hubiese sido mejor salir al super a buscar más harina de trigo. Todo esto por supuesto, mientras yo trataba de despegar el pegoste de mi mesón y diseñar alguna forma de poner una capa de masa en el molde para luego colocar el relleno cuyo olor estaba ocasionando confrontaciones internas entre seguir o comernoslo como estaba, solo con pan.

Bien.... mi esposito finalizó el sermón y se dispuso a darme una solución diferente a la papelera. Después de unas respiraciones profundas y entonar el ya tan conocido OMMMMMM me dispuse a hacerle caso a mi maravilloso hombre y comencé a preparar la base de la "empanada" y por supuesto, como mucho de lo que mi chico preferido propone, aquello funcionó.

POR FIN !!!!!!!!, tenía la masa bien extendida en el molde y podía colocar el relleno, así que yo seguía convencida de que todo quedaría bien.

Coloqué la cebolla en el fondo, la carne, las tiritas de pimientos, las pasitas dispersas yyyyyyyyyy, caí en cuenta que la técnica de estirar la masa para la base no podía aplicarla para el tope... HORRORRRRRRRR!!!!!!!!!!!!!. Ya estaba al borde, no tenía más recursos a los que recurrir para estirar la masa que cubriera mi empanada..... nif ! nif ! nif ! ..... peleando conmigo misma y dispuesta a no dejarme vencer, aplane pedacitos de masa que luego deje caer sobre la empanada, y la metí al horno.

Esperamos..... esperamos...... esperamos..... olimos.... olimos..... olimos..... revisamos, revisamos, revisamos y por fin aquello estuvo listo. No se veia bonita pero olía como manjar de dioses así que me dispuse a servirla.

...........La harina tostada se desmorona terriblemente, así que retiré con mucho cuidado las capas que había puesto para "tapar" la "empanada" y aún en contra de mi voluntad, las puse en el cesto de la basura.

Por favor, no inventen hacer empanada gallega con harina de arroz..

NO SIRVE !!!! NO FUNCIONA !!!!!.


Luego, y aún sin perder las esperanzas, me dispuse a servir en los platos..... ésto resultó bastante fácil ya que todo el relleno había mantenido la harina de la base bastante húmeda por lo que no se desmoronó, así que serví dos grandes, jugosos, olorosos pedazos de "empanada gallega" en los platos y nos dispusimos a comer.


No se si podré expresar lo que sucedió a continuación....... mi esposo fue la valiente criatura que dió el primer mordisco y su cara me lo dijo todo....... NO FUE MI MEJOR PLATO!.... aún así, con su maravillosa mejor sonrisa me dijo "Mi amor, el relleno te quedó riquísimo".


Como supondrán ya yo estaba desarmada, después de esa frase no podría descargar nada de lo que sentía tras toda la tarde en la cocina peleándome con la masa de arroz. Como tenía que morir calladita, mejor probaba yo misma aquella cosa y procedí a darle el primer mordisco.....


POR FAVOR, nunca pero NUNCA!!! hagan empanada gallega con harina de arroz, se los suplico !.....antes de intentarlo infórmense bien de las ventajas y desventajas de este producto, hagan el cursillo fisico-químico de las diferencias atómicas de las harinas, no comentan el error de pensar que harina es harina porque NO LO ES !!!!!!!!!!......, aquel bocado era una combinación de talco de bebes con una deliciosa preparación para relleno de empanada gallega.


Por supuesto, las bebidas desaparecieron de la mesa antes del segundo mordisco, que por supuesto, está de más decirles que fue solo de relleno...... que era lo único comestible!.


En fin, no todo puede ser comida para dioses.... en el universo también existen mortales.....y otras criaturas.... jajajajajajajaja.

Eso si, las fotos me quedaron buenísimas !!!!

En fin, esta vez no fue buena idea reemplazar ingredientes, eso salió bien con las hamburguesas de lentejas pero con la empanada..... sin comentarios!.

P.D.: consejo especial.... cuando aumenten las cantidades de harina, tambien deben aumentar las cantidades de sal !.

QUE CLASE DE VIVENCIA !


Hg / Mayo 06, 2010